viernes, 2 de marzo de 2012

La porquería de cuerpo que habito.

Llevo varios días que me cuesta mover un poco la pierna derecha y siento un ligero dolor zumbante a la altura del cachete. No llega a ser dolor, pero casi. Si fuera mi amiga Diana (hipocondríaca a más no poder), ya estaría pensando que tengo algo parecido a ciática o algo de algún nervio, de la columna o yo que se.
Como soy un poco cagueta para estas cosas, lo que sí me he dado cuenta de que tengo que hacer algo. Ya me lo dijo Susana, otra amiga mía que es fisio: "A ti lo que te hace falta, más que ejercicio, son estiramientos". Así que me creo que le voy a hacer caso por una vez y me voy a dejar de vaguerías, porque me noto que tengo el cuerpo más débil que un puñado de pelusas. Siempre que me levanto por las mañana y bostezo estirándome, me crujen todos los músculos y huesos del cuerpo, como si fuera una tabla. Y es normal. Voy del trabajo a casa y de casa al trabajo. Y en mi trabajo no hago nada de trabajo físico, o sea que mi cuerpo, aunque delgado, esta hecho una porquería.
Me he pedido por internet un balón de ejercicios, de esos que usa Elena Anaya en la peli de Almodovar "La Piel que Habito", y me llegará el viernes día 9 de marzo. Entre semana buscaré por internet algún libro de ejercicios y miraré vídeos de youtube para ver como se utiliza y ya veremos como ve va.
Hasta la próxima.

jueves, 1 de marzo de 2012

Ley Sinde-Wert, o como el gobierno le lame el culo a ciertos sectores.

Hoy empieza a tener efectos la ley vulgarmente llamada Sinde-Wert, o como el gobierno le lame el culo a las grandes industrias del audiovisual. Hoy empieza a tener efecto otra bajada de escalón en las libertades sociales. No solo no basta con el cercenado de los derechos de los trabajadores al que estamos asistiendo con la aprobación de la nueva reforma laboral, sino que ahora también, y sin que lo diga un juez, nos van a quitar la presunción de inocencia de forma "burocrática". Nos podrán cerrar las web de enlaces así, sin más, sin un juicio para ver si son legales o no. Supongo que habrán querido evitar los juzgados, habida cuenta de que ya hay muchas sentencias favorables a los propietarios de las webs de enlaces.
Recuerdo ahora que Paulo Cohello vendía en rusia muy pocos libros, hasta que decidió poner sus libros gratis en su web diciendo a los lectores que si después de leerlos les gustaban los compraran. Pues bien, las ventas de libros aumentaron de forma exponencial allí. Y eso me hace pensar que muchos de los artistas que tanto se quejan, principalmente en el mundo de la música y el cine, serían tan conocidos sin la mal llamada "piratería". Me pregunto si hubieran vendido tanto.
Creo que estaban muy mal acostumbrados, ganaban barbaridades, vendiendo sus trabajos a precios exorbitados y sangrando a la gente. Cuando no había internet, eran los amos del cotarro y se aprovechaban de la gente. Pero el avance de las tecnologías, la banda ancha etc, les ha venido de sopetón a estos dinosaurios anticuados, que quieren mantener su estatus a cualquier precio. A mi personalmente me "escocía", era como si me dieran puñaladas cada vez que tenía que comprar un disco a 28, 30 o 32 euros. O antes a 1500, 2000, 3200 pesetas y precios similares. Vamos, un robo. Un robo por parte de las casas discográficas, distribuidoras, y todos el engranaje que había montado a costa de nosotros, los consumidores finales. Y no hablemos ya de los precios de las películas. Me sentía verdaderamente estafado cuando me compraba un dvd carísimo y al abrirlo veía que solo traía el dvd en sí y ni un triste libreto ni nada. Sí, a veces traían un papelito con publicidad para engancharte en futuros robos. Y de extras nada de nada, solo cuando empezaron las descargas de internet se esmeraron un poco en la calidad, y en añadir alicientes para que la gente comprara.
Yo, personalmente, hace tiempo que compro la música por internet, a precios más que razonables. Un nuevo LP a 9.90 € con 15 canciones no me parece caro en iTunes, por ejemplo. Y los libros igual, en la tienda online Amazon hay libros por 0,90€, igual que en otras tiendas.
Y aquí acabo mandando un mensaje a la industria: Chicos, modernizaos u os vais a quedar atrás, tan atrás que vais a ir a la ruina, porque os digo una cosa: las descargas de internet no van a parar, por mucho empeño que pongáis, por mucho que os paséis por el forro los derechos fundamentales, por mucho que evitéis descaradamente la justicia con la connivencia del gobierno, por mucha ley Sinde-Wert, ni ACTA que se apruebe. Siempre las ha habido y siempre las habrá. No se le pueden poner puertas al campo, y quien piense que sí, debería dar un cursillo acelerado de nuevas tecnologías y olvidarse ya del mundo de las gramolas y los cassettes.